LAGO DI COMO

Italia es uno de los países que más conozco ya que hago varios viajes durante el año por motivos personales pues tengo familia que vive allí y también he podido “callejearla” en las escapadas realizadas con mis compañeros de la escuela de italiano y con amigos.

Para mí uno de los lugares más bellos, entrañables y románticos que he visto ha sido sin duda el Lago di Como. Se trata del tercer lago más grande de Italia (146 km) ubicado en la región de Lombardía situado a muy pocos kilómetros de Milán (30 minutos) y su origen parte de la época glaciar cuando lenguas de hielo bajaron de norte a sur del país.

Su navegación es bastante cómoda ya que el lago tiene forma de “Y” invertida lo que facilita que los recorridos entre sus pueblos sean de corta durada y por tanto en un solo día se puedan visitar varios lugares.

Asimismo el Lago di Como se presta a realizar infinidad de actividades como kayak, windsurf y además está muy valorado por su riqueza histórica así como por la gran cantidad de mansiones que acoge de ricos y famosos.

Para más información sobre rutas por el Lago puedes consultar la siguiente web: Navigazione Laghi 

Relato de bonita una escapada

Era el mes de Octubre y seis “studenti-amici” del curso de italiano decidimos hacer una escapada de fin de semana a nuestra querida Italia.

Llegamos a la Stazione Centrale de Milán a las tantas de la noche, lo habitual en nuestros viajes juntos y después de encontrar la línea correcta de bus nos dirigimos hacia nuestro hotel para registrarnos y seguidamente buscar un lugar para cenar ya que estábamos verdaderamente hambrientos.

Como siempre Italia nos volvió a sorprender por su espectacular gastronomía y pronto se nos olvidó todo nuestro cansancio.

La mañana siguiente la dedicamos a visitar la ciudad esperando sorprendernos por sus codiciadas “boutiques” con  la moda más fashion, pero realmente nos llevamos una gran decepción así que optamos por hacer una visita más cultural visitando su blanca catedral il Duomo, las galerías de Vittorio Enmanuela, il Castello di Sant´ Angelo entre varias iglesias y recónditas plazoletas.

Apurando ya las horas de la tarde y los encantos de las calles milanesas nos dirigimos nuevamente a la estación central para tomar el tren hacia Como, ciudad recóndita que pudimos visitar al regreso de nuestro viaje ya que nada más llegar tomamos un bus nocturno que nos llevó hacia el pueblecito de Menaggio en el que hicimos turismo nocturno y pasamos la noche. Guardo un entrañable recuerdo de este precioso pueblecito no sólo por sus preciosos rincones sino porque aquí probamos el conocido cocktail italiano Negroni que aminoró las horas de sueño y el cansancio acumulado.

A la mañana siguiente y ya con las energías renovadas compramos el ticket-bono que nos daba opción a subir al ferry transbordador que navega por todo el lago como si fuera un metro, así que cuadramos horarios para aprovechar al máximo el día y pudimos visitar ciudades como Bellagio, pueblo precioso de postal, Tremezzo o Varenna a cual más bonito y encantador.

El paseo en barco por el lago fue verdaderamente agradable y relajante y aún me vienen a la mente la visión de sus pueblos situados a sus orillas, los campanares de sus iglesias que destacaban a la lejanía, palacetes, arcos, pasadizos secretos, puentes repletos de enredaderas, montañas …

Durante los días del viaje el romanticismo se apoderó de mí y es que indudablemente el Lago di Como es un lugar para enamorase!!

Siempre guardaré en mi recuerdo y con mucho cariño esta escapada al Lago di Como porque fue el escenario de momentos felices vividos con grandes amigos con los que compartí muchas risas e inquietudes acompañadas, como no, por un buen vino y por la riquísima cocina italiana ...

 ... MAMMA MIA!!