DINERO

Cuando viajas al extrangero algo básico y necesario es llevar divisas del país en cuestión (muchas veces dólares américanos bastarán), además de una tarjeta de crédito que nos servirá de medida de emergencia para poder pagar imprevistos o aquellas compras o “caprichos” que a veces son irresistibles y que en nuestro país costarían mucho más.
 

Dependiendo del país al que viajemos será conveniente llevar euros o dólares. Vietnam y Japón por ejemplo son países en los que perfectamente se pueden llevar euros y una vez allí iremos cambiando paulatinamente a medida que avanzemos en nuestro viaje. Lejos queda la idea de marchar de nuestra ciudad ya cargados con la divisa del país al que vamos pues entre comisión y comisión de cambio los bancos te “despluman”.

Es recomendable informarse con anterioridad bien a través de guías de viajes o en foros, de los lugares del país que nos harán mejor cambio ya que si la cantidad es muy elevada la diferencia en el cambio será considerable y nuestro bolsillo lo agradecerá.

Siempre siempre siempre llevo el dinero conmigo, a través de esos pequeñas “riñoneras” de viaje que van por debajo de la ropa y por supuesto nunca dejo dinero en los hoteles (a una amiga le robaron en su propia habitación mientras dormía en un hotel de 4 estrellas!!).

Otro consejo, si vais a países donde la humedad es considerable, por ejemplo países asiáticos, sobre todos en épocas de máxima calor, recomendaría llevar los billetes dentro de la riñonera pero a su vez guardarlos dentro en una pequeña bolsa de plástico para que no se estropeen, dado que el calor, el sudor y el movimiento constante pueden hacer que los billetes se deterioren gradualmente de manera que no sean válidos.